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la ROTONDA

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Dialogus singularis per noctem ebriam quatoris amicos participantum DE CANIBUS

Unos de los diarios más imparciales del panorama español, el ABC, dedicó hace unos días su portada al problema de la violencia generada por los llamados grupos de "canis". No sabemos si con motivo de esto especialmente, pero sí debido a la incipiente notoriedad del tema y el reflejo que se le está dando en los medios de comunicación, azuzados por el dulce amargor de los jugos de cebada en tiradores alfalfeños, surgió esta conversación...

G: Hay que ver lo chungo que se está poniendo también el ambiente en la alameda con los jodíos canis estos que andan buscando bulla por ahí.
C: Bueno, por la alameda y por todos lados. Están ya en todos sitios.
A: Es que dondequiera que haya un ambientillo chulo donde la gente se vaya a beber están ya ahí los grupillos de canis.
G: A mí me paso hace poco que estaba yo to tranquilita tomándome un ron cerca del ñam-ñam, cuando de repente algo pasó por el lado derecho de mi cara moviéndome el pelo y vino a tirar mi cubata al suelo de un chocazo. Me quedé to pillá, flipando y pensando que si la botella llega a pasar un poco más a mi izquierda me parte la cabeza y me tienen que llevar a un hospital.
A: ¡Qué fuerte!
C: ¡Tiene cojones!
R: ¡Hay que ver!
G: Bueno, pero es que hace poco vi a uno que al que le había pasado justo eso y se lo tuvieron que llevar al hospital sangrando escandalósamente por toda la cabeza, cubierta también la cara de sangre. Y lo peor es que ni siquiera se sabe porqué lo hacen. Es que no tiene sentido en absoluto.
C: Es que están aburridos y no saben lo que hacer.
G: Sí, y es que son niños que lo tienen todo, a los que no les falta de nada y tienen padres que los quieren, les dan de comer y dinero para que se compren lo que le haga falta o sus caprichos: móviles a la última, moto, etc.
R: Es verdad. Y además tienen muy malos modos y son muy chulos en su hablar. Una vez en un concierto estaba yo allí con unos colegas poniéndo música y me llega un niñatillo cani y me dice que si tenía algo de Prodigy. Yo le dije que eso no se podía tocar con esos instrumentos, y el me respondió en una ofensiva duda que si "¿no tenía ni puta idea de eso?". Yo le volví a recalcar que no es que no tuviera ni puta idea sino que no tenía los instrumentos adecuaos para tocar algo de Prodigy.
El niño iba en plan chulo y no tenía modales ningunos. ¡Qué se creía! ¿Pero si yo Prodigy lo escuchaba cuando tú todavía estabas jugando a las chapas!
A: Pero bueno quillo, a mí me llega un chaval en ese plan y yo no me lo tomo de manera ofensiva. Yo entiendo que esa es su manera de hablar y que de buen rollo se acercó a ti para ver si podías poner algo de la música que a él y a sus colegas le gustaba...
R: No quillo, yo sé cuando alguien me está hablando en plan chulo y cuando no.
C: Ese niño era un chulo.
A: Bueno, si tú lo viste así que eres el que estaba allí, pues vale. Pero a mí me parece que de todos modos no hay que meter en el mismo saco a los violentos y a todos los jóvenes que visten de una manera determinada y tienen unos modos determinados. Para mí esa es su manera de hablar y tanto ellos como nosotros tenemos que saber interpretarla en un diálogo generacional que es más delicado cuanto más distan entre sí las edades de los interlocutores...

En fin, el diálogo se extendió un poco más sobre este tema y otros subtemas, como la estética cani, más casos de violencia motivadas por los "canis", la situación social de los canis, los motivos que empujan a los canis a actuar de esa manera (no encontramos ninguno), la inseguridad que motivan con su violencia, canis y drogas, incomprendidos o mimados tiranos, la actual ley del menor... El tema me parece tela de jugoso y me gustaría más que nunca escuchar opiniones...

los "canis"...
¿jóvenes incomprendidos o dementes consentidos?

próximamente en LaRotonda...

Desierto de asfalto

No es el Gobi, ni Australia, pero sí una prolongación del Sahara, que ha virado al norte para manifestársenos por estos lares y hacernos vivir las sensaciones de un náufrago de las dunas. Una nube de aire caliente nos asedia y envuelve hasta penetrar por nuestras cavidades porosas y expulsar todo el líquido que llevamos dentro. El cielo es una nube gris que hermetiza el calor que desprende la disfrazada tierra, sobre la que pocos valientes se atreven a rondar si no es para dirigirse a un oasis.
En la tierra de alquitrán sólo se vive en surtidores de rubia fresquita o en boquetes artificiales clorados; el resto, la mayoría, se arrima lo más que puede al ventilador o al aire, tratando de evitar el irremediable sopor de este sueño de verano del que no despertaremos hasta septiembre.
Los hay que encontraron el feliz camino de la emigración a la costa; no es difícil, te lleva el instinto, y el itinerario está marcado por una larga caravana, pausada y multicolor. En breve seguiré la caravana hacia el sur; algo debe de haber por ahí...

Peatón Bonzo

Llevaba tiempo deseando publicitar las ingeniosas razones que los componentes del "movimiento" peatónBONZO nos dan para participar en la resistencia contra el coche y todo lo que implica. Peatón Bonzo es una idea que no sé de donde salió pero que salió muy bien. Lo que se pretende principalmente es hacer de la vida del peatón un acto revolucionario diario, cotidiano, que atente de manera pacífica contra el dominio que "unas máquinas peligrosas, ruidosas y humeantes" ejercen sobre las personas en el marco de la ciudad.
Aunque, mejor que resumir, cito directamente de su panfleto "Un poco de teoría para el Peatón Bonzo", no sin antes dejar constancia de que existe un corto muy gracioso sobre el tema que estoy pendiente de ver y del que espero poder dar más señas en breve. Dicho esto,y para los que tengan más tiempo, ahí va un poco del relato del Peatón Bonzo:

"Peatón Bonzo contempla con pena el estado actual de nuestras ciudades: no ve niños y niñas jugando en las calles, observa que todo el mundo va con prisas, poniendo en peligro la vida de otras personas, por todos lados la movilidad del que camina está impedida, las aceras cada vez más inexistentes están llenas de coches aparcados, laszonas verdes sirven de aparcamientos, no hay un sólo espacio donde pasear tranquilo, las calles son jurisdicción exclusiva del tráfico rodado, no hay ni un momento de tranquilidad o silencio, el aire es cada vez más irrespirable, los políticos sólo saben inaugurar rotondas, circunvalaciones, aparcamientos subterráneos..., la gente asume casi sin inmutarse como lo que era una gran ventaja: una máquina para desplazarse más deprisa, ha hecho trizas la convivencia ciudadana en los espacios comunes. La calle ya no es lugar de encuentro de nada, ni de nadie, la calle ya sólo sirve para circular. Ante este panorama, Peatón Bonzo decide ponerse manos a la obra con las únicas armas que tiene a su disposición: la desobediencia y el humor".

Veamos también algunos de los conceptos básicos para el Peatón Bonzo:
- Política autista: "aquella que sólo piensa en el auto, la política de favorecer la movilidad motorizada y privada a costa de lo que sea (guerras, agotamiento de recursos, siniestralidad, pérdida de espacio...). Por su parte Peatón Bonzo no necesita del petróleo para moverse, por tanto no justifica guerras, no hace ruido, ni emite constantemente humos malolientes (a veces sí, pero sus gases no provocan cáncer, sólo peste pasajera), ni por supuesto camina a tan alta velocidad que suponga un peligro mortal para los otros viandantes, además Peatón Bonzo ocupa aproximadamente lo mismo que una persona normal y por tanto no molesta en ningún lugar en que se quede estacionado".

- Hipermovilidad compulsiva: estilo de vida el cual "la felicidad siempre es lejana y se adquiere al buscarla con rapidez. Lo mejor es lo que viene o va muy lejos. Por supuesto mejor lo rápido que lo lento, a costa de lo que sea. Se ha perdido el gusto por lo cercano y lo pausado. Peatón Bonzo no tiene prisas y gusta de preocuparse de su calle, de su barrio, de su ciudad, del paso de cebra más próximo".

-¿Qué es Peatón Bonzo?
-¿Y Despúes De Esto Tú Me Lo Preguntas?.
Peatón Bonzo Eres Tú

ultra_marinos

¿Saben ustedes de dónde viene lo de ultramarinos? Juguemos al rival más débil: cliqueen aquí.
Yo no tenía ni idea y mira que la cosa estaba bien clarita. Por lo visto también se les llamaba coloniales, pero no por los perfumes que allí se respiraran sino porque los productos eran traídos de las antiguas colonias... Aún así yo creo que la opción correcta puede ser la de los supermarineros (el de mi barrio tuvo que serlo, tiene cara de pirata de los de antes...).
Reivindico desde aquí la valía de este histórico tipo de establecimiento que nos proporciona de todo en el momento que más nos hace falta y donde más falta nos hace: al lado de casa.
Además los que suelen llevar los ultramarinos son gente que conoces de toda la vida y representan a un tipo de comerciante que va perdiendo terreno frente a las uniformantes multinacionales, que quieren abarcar todo nuestro consumo y espacio, haciendo de nuestra ciudad algo más impersonal. Uno no suele pararse a hablar con la cajera del supermercado a hablar de lo que pasa en su barrio, pero la gente de los pequeños comercios son familiares y forman parte de nuestra familia, en sentido amplio; sabemos de sus vidas, igual que ellos de la nuestra, y sus intereses van en la misma dirección que los nuestros. La multinacional sólo intenta explotar al máximo nuestro consumo, nuestro trabajo; la multinacional es un ente abstracto al que no vemos y no sabemos dónde va a parar nuestro dinero, y en muchos casos contribuye a fomentar la explotación exagerada e inhumana de muchas personas ajenas a nosotros. Por lo menos, cuando le compro las naranjas y el pan al tendero de mi barrio, sé que ese dinero lo va a usar para comprar unos botines a su hijo...

Addenda: la mejor foto de un ultramarinos que he encontrao está en alfalfa; en la 3ª foto se ve como el hombre del ultramarinos se preocupa por su barrio y sale de la tienda a ver que coño están haciendo con los pobres arbolitos. Lo consideraremos una prueba, refutable claro, de la teoría que hemos expuesto..

La ciudad impersonal

Leyendo un artículo de Luis Manuel Ruiz en el diario El País me topé con una verdad de esas evidentes que uno puede constatar porque las ve en el día a día. Se trata una vez más de las políticas urbanísticas que se llevan o se planean llevar a cabo en nuestras ciudades. Citaré el caso de Sevilla porque es el que mejor conozco. La especulación inmobiliaria arrasa con el centro de las ciudades echando a ancianitas de sus casas mediante esa estrategia que consiste en declarar el edificio en ruina. De este modo se obstaculiza gravemente la vida de muchas personas con el fin de sacar más dinero con los alquileres de piso o con comercios multinacionales. Ahí tenemos La Campana, donde no queda ya más que la antigua cafetería rodeada de McDonalds y Burguer Kings, ahí tenemos el deshaucio reciente en Sevilla de una anciana por no haber pagado 39 euros de alquiler (¡!).
Considero una política similar y muy lamentable la que se lleva a cabo en la Plaza Cristo de Burgos o San Pedro, donde se colocan los fines de semana unas vergonzosas vallas del ayuntamiento, acompañadas de una patrulla de agentes, con el único fin de que los jóvenes no estén allí divirtiéndose. Pero de nada sirve, porque a los que salen a tomar el aire de la calle lo mismo les da hacerlo un poco más pa´lla. La vida de la ciudad se abre paso porque una ciudad no son tanto sus edificios como sus habitantes. Decía Carlos Mármol en el Diario de Sevilla que "el espíritu real de una ciudad, sobre todo en el Sur, son sus ciudadanos". Totalmente de acuerdo, una ciudad es un espacio de convivencia entre personas y me parece lamentable que las presiones del capital lleven a la administración pública a romper esta regla básica para cuyo cumplimiento ha sido creada. (Continuará)